Tomaba el colectivo para ir al trabajo
al otro lado de una ciudad que estaba de vacaciones
era Enero y el sol se vengaba de mi
y de una nueva resaca.
Dormia apoyado a una ventana
era la unica forma de aprovechar el viaje en mi estado.
Siempre despertaba en la misma esquina
no sé porque
siempre la misma angustia
cuando lo primero que veia era ese grafitti:
"¿Sos feliz?"
mierda
no es una pregunta justa.
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3 comentarios:
Y menos a esa hora, en esas condiciones cuando todos estaban de vacaciones y vos madrugando con resaca!
Si ahora te hago la misma pregunta, qué responderías?
quizas soy demasiado cinico para llegar a decir que soy feliz, no se..
necesitariamos muchas charlas para llegar a algo.
y vos, te animas a responderla?
yo diría que por momentos me digo que sí, y cuando pienso en otras cosas es un rotundo no.
digamos que soy una mezcla hecha de plastilinas que a no se puede separar, y nunca las cosas me son Si o No!
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