Cursi

Hace cuatro semanas que no tomo
por ciertos problemas indignos de salud
estuve alejado de los poemas
me volví tan cursi
que por momentos me quiero pegar
pero no pienso escribir con rima
-creo que no podría aunque lo intente-
perdí el cinismo que me salvaba
como el viejo Buk hablándole a su pájaro azul
-pero sin talento-
me ablandé
me domesticaron como al zorro
y eso es bueno
y eso asusta
y eso es nuevo.
En estos días
no me obsesionan las piernas de todas las mujeres
que pasan por mi ventana
no pienso que ropa interior llevan
ni si son gauchitas en la cama
me tiene sin cuidado Independiente
ya no entiendo el conflicto eterno del puerto
y extraño más el café que al ron
pero más la extraño a ella
me preocupa que no le de frío en la mañana
que tome su capuccino
y que el pasado no aparezca desesperado
para cobrar su venganza.
La llamo en la noche
de alguna manera sé cuando está mal
¿telepatía?
le digo idioteces sin sentido
hasta que se ríe
o me insulta
su voz me hechiza
me hace bien
siento paz
o algo así que no puedo definir
la quiero
me quiere
y eso le da sentido a todo.
Sí
parece que me volví cursi
cuando me cruces sonriendo
podés pegarme en la cara
pero eso no va a cambiar nada.