Ultima amenaza

Hoy al llegar a casa te voy a proponer un trato; admitamos los dos que somos un desastre. Por distintos motivos vos y yo estamos condenados. El amor es algo muy complicado, es cruel y los dos somos demasiado buenos en el arte de mentir. Vos vas a amenazarme otra vez, con tu valija marrón a media hacer, haciendo tu ropa bollos para que entre mas fácil (los dos sabemos que te gusta la ropa limpia, planchada y perfumada y cuando te vayas te vas a llevar todo, hasta la ultima bombacha, hasta mi ultimo aliento), vas a llorar y gritarme como una novata de estreno en calle corrientes "me estas cagando la vida, me estas cagando la vida", todavía me pregunto si vos pensas que yo me creo esos chantajes patético, tus lágrimas hirientes que se mezclan con insultos entrecortados. Yo mirare el piso callado, fumando o quizás bebiendo. Opto por el silencio, te escucho quejarte, tu repertorio lo se casi de memoria y vas a citar a la infeliz de tu hermana, que como arruino su vida a los 16 años esta desesperada por ver como arruinas la tuya también. Te diré con un cinismo que latima las orejas que quizás el amor no es suficiente, que yo no soy suficiente, pero te amo, hace lo mejor para vos, pero conmigo, pero sin absurdas amenazas y si no andate a la mierda toma plata para un pasaje y volve a tu casa. Si es necesario voy a admitir por primera vez que te necesito y que estar en la cama con vos es lo único que me salva de la locura en soledad, de hundirme en mi y perderme. Pero no me pidas que cambie, que muchas mas fallaron en el mismo intento, pero vos tenes algo, algo que no entiendo y me asusta, no son tus piernas ni la manera en que me dejas sin aliento y sudando por las noches, definitivamente no es tu asquerosa forma de cocinar, pero tenes algo en las manos cuando me tocas mi cara y haces que sienta que las cosas no son tan malas, que la guerra puede terminar afuera y que yo, y que yo soy realmente afortunado.
Sin embargo me vas a pedir cosas que no te puedo dar, esas que seguramente te dieron todos esos hombres de barro del monton, vos harías una pareja perfecta con algún perdedor con el que te puedas mirar a los ojos y ambos comprueben que se rindieron a la comodidad de la rutina y que ya no tienen el deseo o la pasión de antaño.
Quizás sin mi estés mejor, pero ¿estarías realmente viva? Seamos realistas, tampoco yo soy el peor hombre del mundo y vos estas lejos de ser un personaje de la familia Ingalls.
-Sos una mierda!! mirá a la hora que estas llegando, pelotudo. Venis del bar y seguro que anduviste con alguna de tus putitas!
-Admitamos que los dos somos un desastre..