Que dios bendiga tu falso amor
tus ojos pintados
tu cara de galleta a medio hornear,
extraño tu pose de jarrita de porcelana
que ponías cuando el mundo adulto te superaba
y yo te decía: "es cruel allá fuera para alguien como vos"
podría destruirte la realidad
nunca imaginé que vos serías más cruel
que todos los adultos del mundo juntos
al destruirme en pleno junio.
Algunas veces no queda más nada por hacer
no hay balas en la pistola
ni palabras de consuelo
la noche se llevó lo mejor de mí
aunque hoy me des la mano en la calle
ya no puedo bailar si no hay música
te esfumarías entre los autos
las luces de neón taparían tu huída
pero mierda, me gustaría que estuvieses conmigo
todavía puedo aguantarle a esta vida ¿sabés?
pero no sé por cuanto más.
domingo, 8 de enero de 2012
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